Roberto Garduño

El cambio de paradigma de la movilidad en la Ciudad de México, no sólo implica un cambio en el marco normativo, sino también en las instituciones, precisó Laura Ballesteros, Subsecretaria de Planeación de la Secretaría de Movilidad.

De acuerdo con la funcionaria, el cambio en la estructura de la Secretaría de Movilidad ha permitido que los esfuerzos se canalicen a instancias integradas con personas capacitadas, algo que no sucedía en el antiguo esquema.

“La Secretaría de Movilidad se transformó porque con una nueva ley,  con nuevas herramientas, con nuevos mandatos, con nuevas tareas, necesitaba reformarse la administración pública de la Ciudad”, aseguró Ballesteros.

De acuerdo con la funcionaria, en la época de la Secretaría de Transporte y Vialidad no se tenían áreas especializadas en la Ciudad que trabajaran temas específicos.

Un ejemplo de esto, precisó, es el desarrollo del Sistema Metrobús en 2005, cuando la Secretaría del Medio Ambiente, encabezada en ese entonces por Claudia Sheinbaum, encabezó dicho proyecto.

La funcionaria habló sobre cuatro principios en los que se basa el paradigma de movilidad en la Ciudad, que incluyen los de un marco normativo que tenga como eje central al peatón; el reconocimiento del transporte público como prioridad en la política pública; el derecho a la movilidad como que permitirá garantizar a los ciudadanos el acceso a otras garantías y finalmente el reconocimiento de la caminata y el uso de la bicicleta como formas de movilidad.

“La infraestructura peatonal tiene que ser prioritaria para garantizar que se cierre exitosamente el círculo del viaje de las personas, de qué les sirve tener un sistema de transporte de calidad, si cuando se baja tiene que caminar tres calles con saturación de coches, altas velocidades de los vehículos y semáforos que no sirven”, dijo Ballesteros.

Con estas modificaciones, precisó, se podría hablar de políticas públicas y visión de gobierno que vayan encaminados a lograr un Desarrollo Orientado al Transporte, mismo que garantizaría la inversión del gasto público en medios de transporte, el desarrollo urbano controlado y la priorización en el esquema de movilidad del peatón y el ciclista.

“Lo que hoy la Ciudad está haciendo es una apuesta por grandes ejes de trabajo, estamos hablando del Desarrollo Orientado al Transporte, que buscan ciudades en donde la gente viva más cerca donde trabaja (…) sistemas integrados de transporte y la idea de generar más movilidad con menos autos”, concluyó la funcionaria.

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